¿Cualquier tiempo pasado fue
mejor o antes del 2000, sólo hay productos caducos?
¿El CGI lo maquilla todo o hay
que darle mérito a productos menos potentes a nivel audiovisual pero con mayor
encanto?
¿Estética camp ochentera o visión
contemporánea domesticada bajo mil filtros?
Preguntas que me asaltan en la cola
del supermercado y que quiero responder enfrentando a dos encarnaciones del
personaje maldito de DC.
Supergirl (2015) Episodio
piloto.
En Octubre llegará a la pequeña pantalla las nuevas
aventuras de Supergirl. No obstante, su episodio piloto ya se encuentra en la
web, el cual se inicia con una pequeña Kara Zor-El, abandonando Krypton, tras
los pasos de su primo Kal-El.
Tras esto, su llegada a la Tierra, su adopción por parte de
los Danvers, y sus primeros pasos en National City, tanto como superheroína
como trabajando en el emporio de comunicaciones, CatCo.
El capítulo gusta sin
entusiasmar, y deja la inquietud de que se les vaya de las manos el juego “El
Diablo viste de Prada” de la identidad civil de Supergirl. Así mismo, el que se
deje tan claro el origen de lo que serán los villanos de la serie puede hacer
que su desarrollo peque de convencional.
Y,¿eran necesarios
tantos personajes “mentores” para Supergirl? ¿podrá espabilar esta mujer tan
inocentona con toda esa gente dando consejos?
Con todo, hay buenos efectos
especiales, y todo la parte del origen y la secuencia final de la protagonista
volando entre el skyline de la ciudad deleitará a todos los fans y a los puros
de corazón.
Supergirl (1984)
La verdad que se hace duro, en
pleno 2015, enfrentarte a un producto de estas características. Encima si le
eliminas el efecto nostalgia, ya que no la vi en su día, pues se te puede hacer
bastante cuesta arriba llegar al final de la película.
La idea no era mala: Tras los
decepcionantes resultados de Superman III, intentar reactivar la franquicia del
Hombre de Acero con una aproximación diferente.
Contó un presupuesto holgado,
actores conocidos (Peter O´Toole, Faye Dunaway, Mia Farrow), una BSO compuesta
por Jerry Goldsmith…etc.
No obstante, el resultado es un
delirio de cartón piedra, que cambia Metrópolis por un pueblo de mala muerte en
el que se desarrolla una trama mística que no hay por donde cogerla, y en la que destaca sobre todo, una GUAPÍSIMA Helen
Slater que ilumina la pantalla cuando aparece con el traje rojo y azul, y que
aporta dignidad al personaje.
Por lo tanto, por calidad,
debería salir victoriosa la nueva versión televisiva de Supergirl, pero no.
No, porque Supergirl (1984) con lo
disparatada que es, cuenta con un factor del que no tiene la serie, y ese factor
es la sorpresa.
El aportar elementos nuevos,
inesperados, que sorprendan al espectador. Algo de lo que carece la mayoría del
cine y la televisión actuales, que viven en un permanente deja vu, y que sólo
lanzan productos masivos, que vuelven a moler ideas ya usadas, generando series
como esta Supergirl (2015-) que la podemos seguir tanto yo como mi madre.
Así que invito a dejar atrás los
prejuicios, a no ser tan pijo e indagar en épocas pretéritas, a lo mejor más sencillas, pero más auténticas.
Por último, sólo reseñar una
escena en la que Linda Lee (Supergirl) conoce a su compañera de habitación en
el Colegio Mayor. En esa habitación está colgado un póster del Superman de
Chris Reeve. Unas notas de la música de Williams y esa imagen, generan más
EMOCIÓN que si Henry Cavill entrase, ahora mismo, volando por la ventana.